La celebración judía en la que se recuerda la recuperación del Templo de Jerusalem.
Jabad Lubavitch Costa Atlántica, festejo hoy Janucá, en la Plaza del Agua. Al igual que se realiza en otras ciudades del mundo Mar del Plata encendió la Januquia y festejó Janucá junto con la comunidad.
En esta ocasión, se encendió la cuarta vela de Janucá, la cual fue dedicada a los habitantes de Israel que sufrieron, el 7 de octubre pasado, un brutal ataque. Los encargados de encender la Shamash fueron el Senador Nacional, Maximiliano Abad y el diputado provincial, Alejandro Rabinovich, además estuvieron presentes las concejalas Florencia Ranelluci, de Juntos y María Cecilia Martínez de La Libertad Avanza.
El Rabino Zalmen Lipinski, titular de Jabad Costa Atlántica se refirió al especial momento que está viviendo el mundo, desde el 7 de octubre pasado al decir que “estamos en una época de mucha oscuridad, en la que nuestros hermanos y hermanas que viven en Tierra Santa, están librando una cruenta batalla en su defensa y en la búsqueda de la liberación de los 137 secuestrados que aún permanecen en manos de HAMAS. Una batalla entre los que solo buscan la muerta y destrucción y quienes abrazan y velan por la vida. Tan simple y profundo como el bien contra el mal”. “Un conflicto que no solo nos involucra a nosotros y a nuestros hermanos en Israel, sino al mundo entero”, amplió.
Por otro lado, se refirió a la importancia de “dejar que las llamas iluminen no solo la oscuridad física sino las sombras dentro de nuestros corazones y del mundo.”
Janucá es una celebración judía en la que se recuerda la recuperación del Templo de Jerusalem, luego de la victoria de los macabeos sobre sus opresores. Cuando, los macabeos, empezaron a preparar el templo para la nueva dedicación, se dieron cuenta que tenían aceite suficiente, solo para una noche. Sin embargo, el aceite duró ocho días.
Por este motivo, en cada celebración de Janucá se enciende una vela por día durante ocho días. Esta fiesta simboliza el triunfo de la luz sobre la oscuridad, y por eso, este año, luego de los hechos del 7 de octubre, cobra aún mayor significado, dado que es una nueva fecha para agradecer por la vuelta a casa de quienes han sido secuestrados y para pedir que la luz finalmente triunfe sobre la oscuridad.